**La vida de Jorge M. Arancivia Rossi: Un viaje lleno de pasión y dedicación**
Jorge M. Arancivia Rossi, hijo de Jorge F. Arancivia Chavez y Graciel Rossi Caballero, nació en Lima, Perú, donde pasó sus primeros dieciocho años de vida en el vibrante distrito de Bellavista, Callao. Creció en un entorno taurino hijo de torero, sobrino de torero, ahijado de torero y rico en cultura e
historia, asistiendo al Colegio América, que le proporcionó una sólida educación y una base para los desafíos que vendrían. Su deseo de superarse lo impulsó a emigrar a los Estados Unidos, estudio en Mission High School en San francisco, donde encontró nuevas oportunidades.
Una vez en territorio estadounidense, Jorge no dudó en servir a su país adoptivo. Se unió al Ejército y fue asignado a Fort Bliss y Fort Huachuca, donde recibió entrenamiento intenso y desarrollo de habilidades. Su valentía y compromiso lo llevaron a ser destacado en Vietnam, sirviendo en la Primera División de Caballería Aérea (First Air Cavalry Division), en su regreso de la guerra el Estados Unidos le otorgo la ciudadania. Esta experiencia marcó un antes y un después en su vida, cultivando en él valores de resiliencia y dedicación.
Tras regresar a los Estados Unidos, Jorge se integró al mundo laboral trabajando en Baxter Manufacturing Company durante diecisiete años. Este período de su vida le permitió adquirir conocimientos técnicos y experiencia administrativa, que más tarde utilizaría para abrir su propio negocio de instalación, reparación y venta de equipos de panadería, Arancivia Enterprises Co. Su espíritu emprendedor floreció, y su trabajo se convirtió en un punto de referencia en la comunidad.
Además de su carrera en la industria de la panadería, Jorge encontró una nueva pasión en el automovilismo. Participó como piloto en el club USAC, compitiendo en las categorías de Stock Car y Supermodified Sprint Cars. Estas experiencias alimentaron su adrenalina y amor por la velocidad, convirtiéndose en una parte esencial de su vida.
Años más tarde, Jorge decidió regresar a su tierra natal, Lima, donde se dedicó a la empresa taurina en Junín, Andahuaylas y en la emblemática Plaza de Acho. Su afición por la tauromaquia le permitió combinar su amor por las tradiciones peruanas con su deseo de promover esta forma de arte.
Finalmente, en 1990, Jorge tomó su retiro y se comprometió a difundir el arte de la tauromaquia a través de páginas web y plataformas digitales, asegurándose de que estas tradiciones perduraran en el tiempo. La vida de Jorge M. Arancivia Rossi es un ejemplo de cómo la perseverancia y la pasión pueden llevar a una existencia rica y variada, marcada por contribuciones en múltiples campos.
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